19 de mayo de 2012
Distancia: 21,1 km

SUNSET RUNNERS volvió a Castilla-La Mancha tras más de dos años y medio desde su última visita (Pozo Cañada, septiembre de 2009). El motivo fue el Medio Maratón de Almansa, la carrera manchega más popular que reunió a más de 4.000 atletas. El recorrido consistía en dos vueltas a un circuito urbano que, sin tener ninguna rampa de gran desnivel, apenas tenía tramos completamente llanos.

Con la baja de última hora de José Carlos Mayor, la expedición Sunset para esta cita estuvo compuesta por Manuel Chicano, Alejandro Falgas y Juan Antonio Pujante.

Después de 150 kilómetros de viaje (alguno más debido a problemas técnicos con los dispositivos GPS), los tres Sunset Runners desembarcaron bajo la sombra del Castillo de Almansa a las cinco y media de la tarde. Una impecable organización habilitó la zona de aparcamiento junto al polideportivo donde se recogían los dorsales, se encontraban los vestuarios y, además, se situaban la salida y la meta.

Lo más importante es que toda la gente de Almansa estaba volcada con la carrera. En todos los tramos del recorrido había gente dispuesta a colaborar; los vecinos sacaban sillas (y mesas con aperitivos) a las puertas de sus casas dispuestos a disfrutar del espectáculo; peñas y asociaciones organizaban pequeños números de animación al paso de los corredores; en las terrazas de las cafeterías se giraban los asientos hacia el recorrido. No existía distinción de edades: desde lo más pequeños hasta ancianos en sillas de ruedas (y bombonas de oxígeno al lado) se convertían en público incondicional.

En definitiva, toda la ciudad de Almansa estaba pendiente de su medio maratón.

La climatología era inestable en los momentos previos al inicio. Un fuerte viento hacía que se alternasen rápidamente intervalos luminosos y nublados: la amenaza de lluvia estaba presente. En la zona de salida, Chicano, Álex y Juan Antonio intentaron colocarse en posiciones no demasiado retrasadas para evitar a los corredores más lentos. Chicano y Álex, en forma tras sus carreras de primavera, buscaban despedir la temporada de medias maratones con una buena marca; Juan Antonio viajaba casi como turista con el único propósito de completar la prueba.

De este modo, nada más comenzar iniciarse la carrera, Manuel Chicano y Álex Falgas se marcharon por delante, quedando Juan Antonio más rezagado. Antes de completar el primer kilómetro, apareció la lluvia.

Como si las nubes hubiesen estado esperando toda la tarde para descargar, al segundo minuto de carrera se desató una tormenta. Fue un chaparrón tan breve como intenso, lo suficiente para calar a los corredores y levantar el calor latente en el asfalto, generando un peculiar bochorno. Poco después, la fuerza de la lluvia amainó, pero nunca dejó de caer agua durante toda la tarde.

Chicano salió fuerte desde el principio, marcando un ritmo en torno a 4'20”/km; Álex, con el recuerdo de su bajón en la media de Murcia, quería regular energías; por detrás, Juan Antonio optó por marchar a 5'30”/km, lo que provocó que durante el primer tercio de carrera fuese sobrepasado por multitud de participantes.

Así, dos amigas de SUNSET RUNNERS, Marieta Cano y María del Mar Molina, aprovecharon para saludar a Juan Antonio mientras lo adelantaban cerca del segundo kilómetro.

La lluvia, entonces intermitente, no espantó al público de Almansa, sino todo lo contario. Con paraguas o sin él, la gente seguía animando con aplausos, tambores, megáfonos o a gritos de “si vosotros os mojáis, nosotros también”.

Al paso por el ecuador de la carrera, Manuel Chicano mantenía su intenso ritmo y, en consecuencia, sus opciones de mejorar su marca personal. Cumpliendo su objetivo, Álex Falgas cerraba la primera mitad a un ritmo inferior a 4'40”/km y conservaba fuerzas para afrontar con garantías el resto de la prueba. Juan Antonio, por su parte, bajaba discretamente de 5'30”/km.

A la hora de carrera, arreció la lluvia. Un nuevo chaparrón más violento que el anterior volvió a castigar a los participantes. El agua caía con tanta fuerza que golpeaba como si fuese granizo a los corredores. Además del impacto de las gotas, otro problema adicional fue que las calles comenzaron a encharcarse. Zapatillas y calcetines se mojaron de un modo masivo, complicando el tramo final de la prueba.

A pesar de estas inclemencias meteorológicas, Manuel Chicano y Álex Falgas continuaban luchando por mejorar sus marcas personales. Mientras tanto, Juan Antonio recibía una grata sorpresa. A la altura del kilómetro 15, vio que le adelantaba con un ritmo constante y seguro Antonio Mondéjar Albaladejo, mítico corredor popular y, lo que es más importante, entrenador de baloncesto de Juan Antonio (y otros Sunset Runners) en el crepúsculo del siglo XX.

Juntos departieron de lo divino y de lo humano bajo la lluvia: repasaron la reciente Maratón de Madrid (donde, tras más de 42 kilómetros, apenas les separó un minuto) y disfrutaron del espectacular ambiente de las calles de Almansa. “La dureza no está en el recorrido, sino en lo rápido que quieras hacerlo”, apuntaba Alba según se acercaba el final. Lo curioso de este improvisado dúo es que ambos se impusieron tácitamente un ritmo cercano a 5'00”/km.

No dejaba de llover, pero el público seguía animando. Durante todo el recorrido, los espectadores arropaban con sus aplausos a los participantes, ya fuese desde el refugio de un paraguas, sentados bajo las sombrillas de las terrazas, cobijados en los portales o mojándose como si ellos también estuviesen corriendo.

Manuel Chicano cedió ligeramente en algunos momentos, aunque eso no impidió llegar a meta con un extraordinario tiempo, su segunda mejor marca en esta distancia.

Álex Falgas completó una excelente segunda mitad de carrera y consiguió su objetivo: pulverizar su record personal en tres minutos y medio.

Juan Antonio, ya siempre en la honorable compañía de Antonio Mondéjar Albaladejo, firmó una media cercana a 5'15”/km. Más allá de la marca, le queda el hito de haber cruzado la meta junto a un corredor tan ilustre.

Tras la carrera volvió a desatarse una feroz tormenta. Lluvia, viento e, incluso, relámpagos acompañaron a los Sunset Runners en los 150 kilómetros de vuelta a casa. Sin embargo, ni esa mala climatología pudo empañar una jornada entrañable, el día que SUNSET RUNNERS conquistó Almansa.

> Clasificación general. Ver.
> Detalles de la carrera (datos de Álex Falgas). Ver.
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